El Caribe vive momentos de máxima tensión tras la rápida intensificación del huracán Melissa, que alcanzó la categoría 5 en la escala Saffir-Simpson, la más alta y peligrosa. Con vientos sostenidos cercanos a los 260 kilómetros por hora, marejadas ciclónicas de gran altura y lluvias torrenciales, el fenómeno se perfila como uno de los más devastadores de los últimos años en la región.
Evolución y características del huracán
Melissa se formó días atrás en el mar Caribe central y, gracias a las altas temperaturas del océano y condiciones atmosféricas favorables, se fortaleció de manera acelerada hasta convertirse en un huracán de categoría máxima. Su estructura presenta un ojo bien definido, rodeado de bandas nubosas compactas que generan precipitaciones intensas y ráfagas capaces de arrasar techos, árboles y tendidos eléctricos.
Los especialistas advierten que su comportamiento es extremadamente peligroso por su lento avance, lo que puede generar acumulados de lluvia sin precedentes y prolongar la exposición de las zonas afectadas a los vientos huracanados.
Trayectoria prevista
Actualmente, Melissa se desplaza hacia el noroeste y se espera que impacte directamente a Jamaica entre la noche de este lunes y la madrugada del martes. Posteriormente, se proyecta que continúe su ruta hacia el sureste de Cuba y, de mantenerse las condiciones actuales, podría alcanzar también a las Bahamas.
El desplazamiento errático del huracán incrementa la incertidumbre en torno a su trayectoria, aunque se prevé que las islas del Caribe occidental serán las más golpeadas. La magnitud de sus bandas nubosas ya ha comenzado a afectar a Haití y República Dominicana, con lluvias torrenciales y cortes de energía en distintas comunidades.
Riesgos y afectaciones
El paso de Melissa plantea varios riesgos inmediatos:
Marejadas ciclónicas: olas entre 3 y 5 metros podrían impactar las costas de Jamaica y el oriente cubano, provocando inundaciones repentinas.
Precipitaciones extremas: acumulados de entre 380 y 760 milímetros de lluvia, con registros puntuales que podrían superar el metro, elevan el riesgo de deslizamientos y crecidas de ríos.
Vientos destructivos: ráfagas que superan los 260 km/h con potencial de arrasar con infraestructuras precarias y colapsar líneas eléctricas.
Medidas de emergencia
Las autoridades en Jamaica han decretado evacuaciones preventivas en comunidades costeras y zonas de riesgo por deslizamiento. En Cuba, las provincias orientales se encuentran en estado de vigilancia, con activación de refugios temporales y suspensión de actividades marítimas.
República Dominicana y Haití han reforzado los protocolos de atención a emergencias ante la posibilidad de lluvias continuas que incrementen la vulnerabilidad de sus comunidades.
Llamado a la prevención
El huracán Melissa representa un escenario de gran amenaza para el Caribe. Ante ello, se exhorta a la población a seguir las recomendaciones de las autoridades locales, abstenerse de desplazamientos innecesarios, asegurar sus viviendas y mantener provisiones básicas de agua, alimentos y elementos de primera necesidad.