Bogotá, 22 de agosto de 2025.
El Consejo de Estado ratificó una decisión judicial clave que anula la elección de Jaime Andrés Beltrán como alcalde de Bucaramanga para el período 2024-2027. La decisión, definitiva e inapelable, se basa en la evidencia de doble militancia en modalidad de apoyo, una conducta prohibida durante los procesos electorales.
¿Qué motivó la decisión?
Durante la campaña, aunque Beltrán fue avalado por el movimiento Colombia Justa Libres, se comprobó que públicamente apoyó —en actos electorales y mediante comunicación directa— a candidatos al Concejo Municipal inscritos en otros partidos como La U. Esto claramente contraviene las normativas que prohíben la militancia cruzada o el respaldo hacia otros partidos fuera de la coalición avaladora.
El fallo del Consejo de Estado confirma la sentencia inicial emitida en diciembre de 2024 por el Tribunal Administrativo de Santander, cerrando la vía de recursos ordinarios para continuar en el cargo.
¿Qué sigue ahora?
El alcalde debe abandonar su cargo inmediatamente. El gobernador de Santander tiene bajo su responsabilidad la designación de un alcalde encargado, tras recibir una terna presentada por la coalición Defendamos Bucaramanga. En un plazo máximo de 45 días se convocará una elección atípica, en la que los ciudadanos elegirán un nuevo mandatario para completar el período vigente hasta el 31 de diciembre de 2027. Se espera que este proceso electoral especial se realice en octubre.
Repercusiones políticas y administrativas
El fallo genera un vacío institucional en Bucaramanga, con implicaciones en el desarrollo de políticas públicas, ejecución presupuestal y continuidad administrativa.
Se abre una etapa de transición política que puede intensificar el debate entre quienes defendieron a Beltrán como un cambio y quienes advirtieron sobre la legalidad de su campaña.
También exalta el debate sobre la ética política, la transparencia electoral y el respeto a las reglas que regulan la participación en coaliciones partidistas.
Conclusión
La confirmación de la nulidad de la elección de Jaime Andrés Beltrán marca un momento decisivo en la vida institucional de Bucaramanga. El sistema de justicia electoral ha actuado para proteger la transparencia, a la vez que debe vigilar que el proceso de transición sea ordenado y legítimo para recuperar la confianza ciudadana.