Las instituciones financieras han lanzado una campaña de seguridad para alertar a sus clientes sobre el creciente riesgo de fraude bancario, especialmente a través de métodos como el phishing y el vishing. Frente al aumento de estas amenazas, los bancos están reforzando sus medidas de seguridad y comparten recomendaciones clave para que los usuarios protejan sus datos y eviten caer en engaños.
¿Cómo operan las amenazas?
El phishing, una técnica de fraude en ascenso, se presenta a través de correos electrónicos falsos que intentan engañar al usuario para que comparta información confidencial, como contraseñas o números de cuenta. Los estafadores emplean técnicas de ingeniería social para crear escenarios que parecen confiables y urgentes, como advertencias de seguridad o premios falsos, manipulando a las personas para obtener su información personal. Otras variantes incluyen el vishing (llamadas fraudulentas) y el pretexting (escenarios engañosos que simulan ser comunicaciones legítimas).
Consejos para proteger tu información bancaria
No compartas información confidencial: Nunca reveles contraseñas, números de tarjeta o códigos de verificación a través de correos, mensajes de texto o llamadas. Ningún banco solicitará esta información de esta manera.
Verifica siempre el origen de las comunicaciones: Si recibes un mensaje o llamada sospechosa, contacta al banco a través de los canales oficiales. Los correos y sitios web deben tener una URL segura (https://) y pertenecer al dominio legítimo del banco.
Evita caer en trampas de urgencia o promesas falsas: Los estafadores suelen generar pánico o crear ofertas muy atractivas. Si algo parece demasiado bueno para ser cierto o demasiado urgente, verifica con tu banco antes de actuar.
Denuncia de inmediato cualquier sospecha: Si detectas actividades inusuales en tu cuenta o crees haber sido víctima de fraude, comunícate de inmediato con el banco. Así, se podrán tomar medidas rápidas para proteger tus activos.
El compromiso de las entidades bancarias
Los representantes de varias instituciones financieras destacan que la seguridad es un pilar esencial de la experiencia del cliente y que los bancos trabajan constantemente para mejorar sus controles de ciberseguridad. Sin embargo, subrayan que los usuarios también deben asumir un rol activo en la protección de su información, adoptando hábitos de seguridad digital. A través de campañas educativas, invitan a los clientes a mantenerse informados sobre las nuevas tácticas de fraude y a estar alertas frente a posibles comunicaciones sospechosas.
Con estas iniciativas, las instituciones financieras refuerzan su compromiso con la seguridad de sus clientes, generando conciencia sobre los riesgos del entorno digital y promoviendo prácticas seguras para que cada usuario pueda navegar y realizar operaciones bancarias con confianza.