En un caso que ha captado la atención tanto en Colombia como en México, seis jóvenes colombianas, que se encontraban desaparecidas desde mediados de septiembre, fueron rescatadas tras un operativo conjunto entre las autoridades de ambos países. Las jóvenes, que habían viajado al puerto de Veracruz, México, bajo la promesa de obtener trabajos en una supuesta agencia de modelaje, fueron reportadas como desaparecidas luego de que sus familias no tuvieran noticias de ellas durante más de una semana.
Las jóvenes, originarias de Medellín, Bogotá, Pereira y Cúcuta, fueron contactadas por una persona que les ofreció trabajo en México. El 19 de septiembre viajaron al país y se esperaba que regresaran el 22 de ese mes. Sin embargo, tras perder contacto, sus familias empezaron a preocuparse. Según algunos testimonios, las jóvenes mencionaron que las circunstancias en Veracruz habían cambiado, y algunas incluso habrían alertado a sus familiares sobre una posible amenaza antes de desaparecer por completo.
El caso encendió las alarmas en Colombia y México, lo que llevó a un despliegue de acciones diplomáticas y policiales. Las familias recibieron llamadas pidiendo dinero a cambio de la liberación de las jóvenes, lo que aumentó los temores de que estuvieran en manos de una red de trata de personas. La intervención de la Policía colombiana, en coordinación con la Fiscalía General del Estado de Veracruz y la Policía mexicana, fue clave para dar con el paradero de las colombianas. Finalmente, el 1 de octubre se confirmó que las seis jóvenes habían sido rescatadas con vida.
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, confirmó el exitoso rescate y agradeció a las autoridades mexicanas por su colaboración. Sin embargo, no se han proporcionado detalles específicos sobre las condiciones en las que se encontraban las mujeres al momento del rescate o sobre la operación que permitió su liberación.
Se sospecha que las jóvenes fueron secuestradas por miembros de una organización criminal dedicada a la trata de personas, un fenómeno que ha afectado a muchos migrantes en México. En este caso, se presume que las jóvenes fueron engañadas bajo la promesa de trabajos legítimos, solo para ser retenidas y forzadas a realizar actividades ilícitas.
El operativo incluyó la intervención de equipos especializados y la activación de canales diplomáticos entre los dos países. Las autoridades también contactaron a familiares de las desaparecidas para recabar información y agilizar las acciones de búsqueda. Tras el rescate, las jóvenes están recibiendo atención consular y se espera que en los próximos días puedan ser repatriadas a Colombia.
Este caso ha desatado un debate en Colombia sobre los peligros que enfrentan las mujeres jóvenes que viajan al exterior bajo promesas laborales sin garantías, y la importancia de estar alerta frente a posibles redes de trata de personas. Las familias de las víctimas, a pesar de la angustia vivida, han agradecido a las autoridades por su rápida respuesta y por haber salvado a las jóvenes antes de que sufrieran consecuencias más graves.
En los últimos años, se han registrado varios casos de colombianos desaparecidos en México, lo que ha generado preocupación tanto en el gobierno colombiano como entre organizaciones de derechos humanos que luchan contra la explotación de migrantes. Este incidente resalta una vez más la vulnerabilidad de las personas que, buscando mejores oportunidades, se exponen a redes de crimen organizado que operan en varios países de la región.
Ahora, se espera que las autoridades continúen las investigaciones para identificar y capturar a los responsables del secuestro y desarticular posibles redes de trata que operen en la zona. Mientras tanto, las jóvenes estarán bajo protección consular y se procederá a su retorno a Colombia para reunirse con sus familias, quienes han pasado días de angustia e incertidumbre tras su desaparición.
