Santander, mayo 2025 — En una decisión que marca un hito en las estrategias regionales de seguridad, la Asamblea Departamental de Santander aprobó la creación de una tasa especial de seguridad que será cobrada a través de la factura de energía eléctrica, a partir de septiembre de 2025, con una vigencia inicial de tres años.
La medida, impulsada por el gobernador MG (r) Juvenal Díaz Mateus, tiene como propósito recaudar fondos destinados exclusivamente al fortalecimiento de la seguridad ciudadana, en medio de un contexto donde las amenazas del crimen organizado, el microtráfico, la extorsión y la violencia común siguen siendo desafíos latentes en varios municipios del departamento.
💰 ¿Cómo funcionará la tasa?
El nuevo cobro se aplicará en la factura mensual de energía de los usuarios residenciales pertenecientes a los estratos 4, 5 y 6, así como a algunos sectores comerciales e industriales. La fórmula de recaudo aún está en ajuste, pero se estima que el valor mensual será proporcional al consumo eléctrico, garantizando que no represente un impacto desmedido sobre los hogares ni las pequeñas empresas.
Los recursos recaudados no serán de libre destinación, sino que estarán etiquetados para inversión exclusiva en seguridad, incluyendo:
Adquisición de cámaras de vigilancia inteligentes
Implementación de tecnología para detección temprana de delitos
Compra de drones, patrullas y chalecos antibalas
Modernización de los centros de comando y control
Capacitación a policías, militares y personal de reacción rápida
Refuerzo de operativos rurales y urbanos en zonas de alto riesgo
🧭 Una medida con respaldo institucional… y debate ciudadano
El gobernador Juvenal Díaz defendió la iniciativa como un paso responsable, estratégico y necesario para proteger la vida, el comercio, el turismo y la inversión. “La seguridad no es un gasto, es una inversión en tranquilidad y progreso. No vamos a quedarnos de brazos cruzados mientras unos pocos intimidan a todo un departamento”, declaró durante la sesión plenaria.
Sin embargo, la decisión ha generado división de opiniones entre los ciudadanos, especialmente entre los contribuyentes directos. Mientras algunos consideran que se trata de una acción valiente y necesaria para enfrentar la inseguridad creciente, otros la ven como una carga adicional injusta, en medio de un contexto económico que aún arrastra efectos postpandemia.
📊 Transparencia, vigilancia y resultados
La Gobernación ha anunciado que se implementarán mecanismos de control ciudadano y auditoría externa para garantizar que cada peso recaudado sea invertido de forma eficiente y transparente. También se conformará un Comité de Seguimiento, con participación de líderes sociales, veedurías ciudadanas, el sector empresarial y entes de control.
Se espera que con la entrada en vigencia de la tasa, el departamento logre reducir tiempos de respuesta policial, desarticular bandas criminales locales, y mejorar la percepción de seguridad en las zonas urbanas y rurales de municipios como Bucaramanga, Barrancabermeja, Floridablanca, Girón y Piedecuesta.
⚖️ Seguridad sostenible con corresponsabilidad
La tasa de seguridad abre un debate más amplio sobre cómo se deben financiar los bienes públicos esenciales en tiempos de escasez, y si los ciudadanos de mayores ingresos pueden y deben asumir parte de esa responsabilidad. En este caso, Santander apuesta por un modelo de corresponsabilidad entre Estado, empresa y ciudadanía, enfocado en devolver resultados concretos a través de acciones de protección, inteligencia e intervención directa.
La seguridad es el cimiento de la paz social y el desarrollo económico. Con esta medida, Santander busca blindar su territorio y dar una señal clara: aquí se vive con orden, y el crimen no tiene cabida.
Porque como lo dice el lema institucional: #EsTiempoDeSantander… y de actuar con firmeza.