Bogotá, Colombia – El Gobierno Nacional, a través de declaraciones del embajador en la FAO, Armando Benedetti, y del ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, se pronunció con contundencia frente a los recientes disturbios protagonizados por un grupo de indígenas asentados en la Plaza de Bolívar de Bogotá.
El epicentro del pronunciamiento fue la creciente preocupación por los actos de vandalismo, bloqueos y uso irregular de cilindros de gas que, según autoridades, han puesto en riesgo la seguridad de la ciudadanía y de las instituciones cercanas a la zona de concentración.
📢 “Estas personas no representan a las comunidades indígenas que hacen parte de la Mesa Permanente de Concertación con los Pueblos y Organizaciones Indígenas”, enfatizó Benedetti, quien además afirmó que no se puede tolerar la instrumentalización de causas legítimas con fines violentos.
📌 El contexto:
Desde hace varios días, más de 1.800 indígenas, en su mayoría provenientes de comunidades del Chocó, se encuentran concentrados en el centro de la capital, exigiendo garantías para el retorno a sus territorios, mejoras en salud, vivienda, educación y condiciones de seguridad. Sin embargo, las autoridades aseguran que una parte de los manifestantes ha incurrido en acciones que se apartan de los protocolos de protesta pacífica.
El Ministerio del Interior confirma: no hay aval a esas movilizaciones
En un comunicado oficial, el Ministerio del Interior ratificó que los grupos presentes en la protesta no han sido delegados ni avalados por la Mesa Permanente de Concertación, la instancia reconocida para el diálogo entre el Estado y los pueblos indígenas.
“El Gobierno Nacional tiene disposición para el diálogo, pero con quienes representan legítimamente a sus pueblos y están dispuestos a actuar dentro del marco constitucional”, dijo el ministro Velasco.
Además, aclaró que se han abierto espacios para el retorno seguro de los manifestantes a sus comunidades, con asistencia logística y humanitaria. A pesar de estos ofrecimientos, varios líderes se han negado a aceptar las condiciones del retorno, exigiendo mayores compromisos presupuestales y garantías a largo plazo.
🔥 Riesgo y tensión en el centro de Bogotá
Una de las principales alarmas levantadas por las autoridades distritales y nacionales es el uso de cilindros de gas para cocinar al aire libre, a pocos metros de edificios judiciales y sedes del Congreso. El riesgo de explosión o incendio ha generado preocupación en las autoridades y ha sido uno de los motivos que llevó al Gobierno a exigir el desmonte inmediato de estas prácticas.
La Alcaldía de Bogotá y la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) también han intervenido, señalando que las condiciones de salubridad y seguridad en el campamento se deterioran rápidamente.