En una operación liderada por la DIJIN de la Policía Nacional en coordinación con la Fiscalía General de la Nación, se logró la captura de alias “Juan David”, presunto líder de una organización criminal dedicada a la trata de personas con fines de explotación sexual. Esta red captaba mujeres en Medellín y el área metropolitana del Valle de Aburrá, particularmente en el parque Lleras, para enviarlas a Grecia, donde eran obligadas a prostituirse.
Detalles de la operación
La captura tuvo lugar en una finca en la vereda El Hoyo, municipio de Barbosa (Antioquia), donde alias “Juan David” se encontraba escondido desde hacía un año debido a conflictos internos en la organización. Durante el operativo, las autoridades incautaron una escopeta calibre 16, municiones y una libra de marihuana. Simultáneamente, en el barrio Enciso de Medellín, fueron detenidas dos mujeres señaladas de participar en la logística de captación, transporte y acogida de las víctimas.
Modus operandi de la red
Las mujeres, en su mayoría de escasos recursos, eran engañadas con falsas promesas laborales y trasladadas a ciudades como Atenas y Tesalónica, en Grecia. Una vez allí, les confiscaban sus documentos y les imponían deudas imposibles de pagar, bajo amenaza de dañar a sus familias si intentaban regresar a Colombia. Las víctimas eran sometidas a condiciones inhumanas, obligándolas a prestar servicios sexuales a múltiples hombres al día, incluso en condiciones insalubres y sin protección.
Impacto de la organización
Desde 2017, esta red habría explotado a un gran número de mujeres colombianas en diferentes países, principalmente Grecia. En 2023, una operación conjunta entre las policías de Grecia y Colombia permitió el rescate de 54 víctimas, de las cuales 14 fueron repatriadas.
Cargos y medidas legales
Alias “Juan David” y una de las mujeres detenidas fueron enviados a centros carcelarios con medidas de aseguramiento, mientras que la otra fue cobijada con detención domiciliaria. Los cargos imputados incluyen trata de personas agravada, tráfico de armas y tráfico de estupefacientes.
Esta operación resalta el compromiso de las autoridades en la lucha contra la trata de personas, un delito que afecta profundamente la dignidad y los derechos humanos de sus víctimas.