En un importante operativo coordinado entre la Policía Metropolitana de Bucaramanga y la Fiscalía General de la Nación, fue desarticulada la banda “Los Kilates”, dedicada al robo organizado de alta precisión. Tras el reciente asalto a una joyería en Bucaramanga, en el cual hurtaron cerca de $1.600 millones en joyas y dinero en efectivo, las autoridades lograron la captura de diez miembros de esta organización, conocida por sus tácticas meticulosas y su capacidad para evadir a la justicia.
La investigación, que duró más de seis meses, incluyó la revisión de cerca de 500 cámaras de vigilancia y el análisis de múltiples interceptaciones telefónicas. Este esfuerzo permitió a las autoridades reconstruir el recorrido que realizaron los delincuentes el día del robo, así como identificar a los responsables. Entre ellos destaca alias “La Reina”, presunta cabecilla de la organización, quien coordinaba la logística y distribución de roles desde ciudades como Bucaramanga, Medellín y Bogotá.
El día del asalto, los miembros de “Los Kilates” ingresaron al establecimiento disfrazados de policías, aprovechando el factor sorpresa para reducir a los empleados. Tras obtener el botín, emprendieron una huida organizada en vehículos y motocicletas hacia varios puntos de escape previamente planeados, evadiendo el cerco policial hasta llegar a su centro de operaciones en Bucaramanga.
Además de su modus operandi, esta red se destacaba por su estructura jerárquica y su capacidad de adaptarse a diferentes tipos de delitos, desde el robo de joyerías hasta el tráfico de armas. Las autoridades encontraron evidencias de que la banda poseía conexiones para adquirir armas de fuego y falsificar documentos, recursos clave para ejecutar sus actividades sin ser detectados.
En cuanto a las capturas, los detenidos serán procesados por concierto para delinquir, hurto agravado y calificado, y porte ilegal de armas de fuego. La comunidad de Bucaramanga ha expresado su preocupación por el auge de organizaciones criminales de esta índole y ha hecho un llamado para que el sistema judicial asegure la permanencia de estos individuos en prisión, evitando su liberación anticipada.
Este operativo destaca el avance en las estrategias de inteligencia de la Policía Nacional, que incluyen tecnología avanzada para la identificación de rutas y el seguimiento en tiempo real de movimientos criminales. Según voceros de la Policía, el objetivo es consolidar la seguridad en Bucaramanga y generar un efecto disuasivo ante futuros intentos de crímenes organizados en la región.
La captura de “Los Kilates” representa una victoria significativa en la lucha contra el crimen organizado en Bucaramanga y, según expertos en seguridad, refuerza la importancia de las investigaciones integrales y de la colaboración entre entidades para enfrentar redes criminales cada vez más sofisticadas.