En un operativo conjunto entre la Policía Nacional de Colombia, Europol y las fuerzas antidrogas italianas, fue capturado en Medellín Luigi Belvedere, uno de los mafiosos italianos más buscados y principal enlace de la Camorra en Suramérica. La captura de Belvedere, que representa un golpe significativo contra las redes internacionales de narcotráfico, tuvo lugar en uno de los apartamentos de lujo que frecuentaba en Medellín, donde se escondía bajo un perfil discreto y se movía entre varias propiedades para evadir a las autoridades. Se descubrió que Belvedere rentaba inmuebles a nombre de terceros y cambiaba constantemente de residencia para dificultar su localización.
Conocido como uno de los “narcos invisibles” de la mafia italiana, Belvedere operaba como el intermediario clave para la exportación de cocaína desde Colombia hacia varios países europeos, como Italia, España, Alemania y Holanda. Las autoridades italianas emitieron una notificación roja de Interpol debido a su importancia en las operaciones de la Camorra, especialmente como coordinador logístico del envío de grandes cantidades de cocaína. Las investigaciones indican que este capo mantuvo conexiones profundas con carteles colombianos, fortaleciendo la red criminal italo-colombiana que ha facilitado el tráfico de drogas entre los dos continentes.
El operativo que permitió la captura de Belvedere en Colombia forma parte de una estrategia más amplia para desmantelar el tráfico de drogas y crimen organizado en la región. La cooperación entre agencias de diferentes países ha sido esencial para enfrentar el avance de grupos mafiosos europeos en Latinoamérica, quienes han encontrado en Colombia un territorio fértil para la expansión de sus operaciones ilícitas.
