Bogotá, octubre de 2024 – El acto de perdón público a las víctimas de la Unión Patriótica (UP) fue suspendido el 11 de octubre tras la ausencia del presidente Gustavo Petro, quien se excusó alegando un cuadro gripal. El evento, que tenía como objetivo reconocer el genocidio de más de 6,000 militantes de la UP, fue planeado en la Plaza de Bolívar y tuvo un costo de 3.700 millones de pesos, lo que desató críticas por su cancelación. A través de su cuenta en X (antiguo Twitter), Petro expresó sus disculpas y lamentó no poder asistir.
El acto formaba parte de los compromisos del gobierno colombiano para reparar a las víctimas de la persecución y exterminio de la UP en las décadas de los 80 y 90. Este partido fue creado como resultado de los acuerdos de paz entre el gobierno de Belisario Betancur y la entonces guerrilla de las FARC en 1985. Sin embargo, la participación de la UP en la política fue marcada por una serie de asesinatos de sus líderes, incluidos los excandidatos presidenciales Jaime Pardo Leal y Bernardo Jaramillo Ossa.
Malestar de los Asistentes y Críticas al Gobierno
Más de 2,000 familiares y víctimas de la UP, que esperaban en el evento, manifestaron su descontento al enterarse de la ausencia del presidente. Entre los asistentes, se escucharon protestas reclamando la importancia de que Petro, como jefe de Estado, estuviera presente para pedir perdón en nombre del gobierno. La senadora y miembro del Pacto Histórico, Jahel Quiroga, anunció la suspensión del evento y su reprogramación, afirmando que se comprende la situación de salud del presidente.
La cancelación del evento también generó críticas por el alto costo de su organización, con más de 3.700 millones de pesos invertidos. Estos fondos fueron destinados a la logística y montaje del acto, que había sido planeado como un homenaje central en la reparación histórica hacia la UP. Las autoridades deberán reprogramar el acto, lo que podría implicar costos adicionales.
Respuesta Oficial y Futuro del Acto de Perdón
A través de sus redes sociales, Petro reiteró su compromiso con las víctimas de la UP, afirmando que sigue dispuesto a ofrecer un acto de perdón en una futura fecha. El gobierno ha reafirmado su intención de reparar a las víctimas del conflicto, y de continuar con los actos simbólicos y formales que honran la memoria de los perseguidos y asesinados por sus convicciones políticas.
El evento, una respuesta a un fallo de la Corte Interamericana de Derechos Humanos que responsabilizó al Estado colombiano por el genocidio de la UP, es un paso fundamental en el proceso de reconciliación nacional y justicia para las víctimas del conflicto armado.