El alcalde Carlos Fernando Galán anunció que el fenómeno de La Niña incrementará las lluvias en Bogotá el próximo mes, pero el racionamiento de agua continuará debido a niveles preocupantes en los embalses.
A pesar de la llegada inminente del fenómeno de La Niña, que se espera aumente las lluvias en Bogotá, el alcalde Carlos Fernando Galán informó que el racionamiento de agua seguirá siendo necesario. Aunque los embalses del Sistema Chingaza, que abastece el 80% del agua de la ciudad, han alcanzado el 50% de su capacidad, actualmente tienen 25 millones de metros cúbicos menos que el año pasado.
Situación de los embalses
El embalse de Chuza, por ejemplo, tenía 107 millones de metros cúbicos en julio de 2023 (49% de su capacidad), mientras que el 24 de julio de este año registró solo 93 millones de metros cúbicos (42,55%). Esto representa una disminución de 14 millones de metros cúbicos en un año.
El embalse de San Rafael, que en julio del año pasado tenía 55 millones de metros cúbicos (76% de su capacidad), ahora registra 44 millones de metros cúbicos (63,5%). En total, el Sistema Chingaza cuenta con 25 millones de metros cúbicos menos que hace un año.
A pesar de las medidas adoptadas desde abril, que han añadido 18 millones de metros cúbicos adicionales al sistema, el alcalde Galán enfatizó que las lluvias de julio de 2024 han estado por debajo de los niveles históricos. Además, señaló que las precipitaciones en Bogotá no siempre coinciden con las de Chingaza, lo que complica la situación.
Medidas y recomendaciones
El alcalde Galán destacó que, aunque se esperan lluvias en los próximos meses, “no podemos confiarnos”. Es crucial mantener el racionamiento de agua y hacer un llamado a toda la ciudad para reducir el consumo, que ha aumentado ligeramente en los últimos días. Solo así se podrá asegurar que haya suficiente agua a finales de este año y durante 2025.
La Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá (EAAB) indicó que el consumo de agua en la ciudad ha aumentado en al menos un metro cúbico por segundo desde que se relajaron las medidas de racionamiento, alcanzando los 17 metros cúbicos por segundo, con una meta de mantenerlo en 15. El 24 de julio, el consumo llegó a un punto crítico de 17,42 metros cúbicos por segundo, el nivel más alto desde que se implementaron las medidas de racionamiento el pasado 11 de abril.
Actualmente, el racionamiento de agua se realiza día de por medio, extendiendo los ciclos de los turnos de 9 a 18 días.
Conclusión
El alcalde Galán concluyó que, aunque se esperan lluvias, es esencial seguir con las medidas de racionamiento y hacer un esfuerzo conjunto para reducir el consumo de agua en Bogotá. Este enfoque preventivo es fundamental para garantizar la disponibilidad de agua en el futuro cercano y evitar situaciones críticas.