En un Consejo de Ministros que dejó entrever fisuras dentro del gabinete del presidente Gustavo Petro, la vicepresidenta Francia Márquez alzó su voz para expresar su inconformidad con algunas decisiones tomadas recientemente dentro del Ejecutivo. Durante su intervención, Márquez hizo énfasis en la necesidad de garantizar transparencia en la administración pública y manifestó su desacuerdo con la reincorporación de Armando Benedetti, así como con el trato que ha recibido por parte de la canciller Laura Sarabia.
El encuentro, que se llevó a cabo en medio de crecientes cuestionamientos sobre la gobernabilidad y la cohesión interna del equipo de gobierno, puso de manifiesto las diferencias que existen entre los altos funcionarios del país. Francia Márquez, quien ha sido una figura clave dentro del Gobierno Nacional, no dudó en hacer públicas sus preocupaciones y enfatizó que “no todo se está haciendo con la transparencia con la que hoy le estamos hablando al país”, una afirmación que dejó perplejos a varios de los presentes en la reunión.
Críticas a la reincorporación de Armando Benedetti
Uno de los puntos más polémicos de la intervención de Márquez fue su oposición a la reincorporación de Armando Benedetti a un cargo dentro del gobierno. Cabe recordar que Benedetti, exembajador de Colombia en Venezuela, estuvo envuelto en una serie de escándalos tras la filtración de audios en los que hacía declaraciones comprometedoras sobre la financiación de la campaña presidencial de Gustavo Petro.
Márquez expresó su desacuerdo con la decisión de permitir el regreso de Benedetti a la esfera gubernamental, argumentando que no comparte la inclusión de figuras que han estado vinculadas a situaciones que han generado desconfianza en la ciudadanía. Según la vicepresidenta, la administración debe ser coherente con los principios de transparencia y honestidad que prometió defender ante el país.
Tensiones con la canciller Laura Sarabia
Otro punto clave del Consejo de Ministros fue el reclamo de Márquez hacia la canciller Laura Sarabia, con quien ha tenido constantes desencuentros en los últimos meses. La vicepresidenta manifestó su malestar al tener que recordarle reiteradamente a Sarabia su investidura como vicepresidenta, sugiriendo que no siempre ha recibido el trato institucional y respetuoso que corresponde a su cargo.
Este señalamiento no es menor, ya que Laura Sarabia ha sido una figura de confianza dentro del círculo cercano del presidente Petro y ha desempeñado un papel clave en temas de seguridad y relaciones internacionales. Sin embargo, las declaraciones de Márquez sugieren que las diferencias entre ambas son profundas y que podrían afectar la dinámica interna del gobierno en un momento en el que se requiere mayor unidad para enfrentar los desafíos del país.
Impacto y consecuencias de las declaraciones de Márquez
Las afirmaciones de la vicepresidenta han generado revuelo en el ámbito político, ya que no es común que un alto funcionario del Ejecutivo haga críticas tan directas dentro de un espacio cerrado como el Consejo de Ministros. Su intervención dejó en evidencia las tensiones dentro del gobierno y la dificultad para mantener una línea unificada en la toma de decisiones.
Además, estas declaraciones podrían influir en la percepción ciudadana sobre la gestión del presidente Petro, ya que refuerzan la idea de que existen fracturas dentro de su equipo de trabajo. La falta de cohesión y los constantes enfrentamientos internos pueden debilitar la capacidad del gobierno para ejecutar sus políticas y consolidar los cambios estructurales que ha prometido.
A medida que se desarrolla este nuevo episodio de tensiones dentro del Ejecutivo, queda en el aire la pregunta de si el presidente Petro tomará medidas para fortalecer la unidad dentro de su gabinete o si las diferencias entre sus funcionarios seguirán escalando hasta convertirse en un problema mayor para la estabilidad de su administración.