Bogotá, octubre de 2024 – En una operación conjunta entre la DIJIN e Interpol, bajo la coordinación de la Fiscalía General de la Nación, se logró la captura de dos mujeres en Medellín y Soacha, presuntas integrantes de una red internacional dedicada a la explotación sexual de mujeres. Las detenidas formaban parte de una organización criminal que, mediante engaños y falsas promesas de trabajo, trasladaba a las víctimas a países asiáticos, específicamente a Corea del Sur, donde eran obligadas a ejercer la prostitución.
Detalles de la Operación
La operación se centró en la captura de dos mujeres, conocidas como alias “La Paisa” y alias “Camila”, quienes, según la investigación, tenían roles clave dentro de la organización. Alias “La Paisa”, madre de la cabecilla de la red, fue detenida en Soacha y se encargaba de gestionar los documentos y recursos para facilitar el traslado de las víctimas. Durante el allanamiento, se incautaron 25 documentos relacionados con los traslados, un DVR con grabaciones y cartuchos de munición. Alias “Camila”, capturada en Medellín, era la encargada de la captación de mujeres en el área metropolitana, utilizando promesas de empleo bien remunerado.
Red de Explotación Internacional
La investigación reveló que la red, liderada por una mujer colombiana identificada como “Katherine”, captaba a mujeres en Medellín, Bogotá y municipios cercanos, ofreciéndoles oportunidades laborales falsas en Asia. Una vez en Corea del Sur, las víctimas eran sometidas a explotación sexual en locales conocidos como karaokes y no recibían ninguna compensación económica. Además, eran multadas si no cumplían con las exigencias de los proxenetas y, en casos de embarazo, eran obligadas a abortar.
Medidas Judiciales
Las capturadas fueron presentadas ante un juez, y la Fiscalía les imputó cargos por los delitos de trata de personas y porte de armas de fuego. Ambas mujeres fueron enviadas a prisión preventiva. Al mismo tiempo, la Interpol emitió una notificación azul para localizar a la cabecilla de la organización, quien se presume que se encuentra en Corea del Sur.
Este operativo refuerza la cooperación internacional en la lucha contra la trata de personas, un delito que sigue afectando a miles de víctimas a nivel mundial.